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y pensando que sería un tremendo problema, que me iban a investigar más que a nadie en este mundo fui preparada para todo. Llevaba cartas, estados de cuenta, calificaciones, comprobantes, pagos, becas, información... en fin, todo para demostrar quién soy y que en realidad no me interesa quedarme a vivir para siempre en Estados Unidos (como si pura fotito y cartitas pudieran describirme al 100%).
Así que finalmente fui a mi cita a las 6:30 de la mañana, cuando las gallineas apenas empiezan a poner :) Afff pensé que me iba a costar muchísimo levantarme, sobre todo porque casi no dormí (uno de esos días donde se pasa la noche pensando...) y no, resulta que llegué frequita a pesar de que me fui manejando yo solita (obvio mi mami me guió, aunque cada quien en su coche, pero pude llegar y salir y me fue bien!!! cada vez puedo ir a más lugares, ja!).
Total que pensé que la espera iba a ser eteeeeeeeeerna, de como unas 4 horas y había muchisísima gente (con todo y que llegué 20 minutos antes), y ya cuando comenzaba a hacerme a la idea que comienza a avanzar la fila y yo, por ser visa de estudiante y no turista, pasé antes. Sí, había una filita de gente que buscaba visas diferentes: de trabajo, de estudiante, de intercambio, en fin... de todo, pero no eran ni con mucho la fila de 200 que había antes. Total que llevaba una manzanita para la fila porque a esa hora no tenía muchas ganas de desayunar, pero seguro más tarde me iba a dar hambre.... y error... al entrar al edificio me hicieron tirarla. Me sentí mal (hay niños que no tienen qué comer y uno tirando la comida a la basura por las paranoias), pero qué le íbamos a hacer, hay que respetar las reglas y los letreros que dicen: "se prohibe".
Así que iba yo toda perfumada y elegante, dicen que es como una entrevista de trabajo y que a los cónsules les caen mal los fachosos (jajaja!) entonces pues me puse mis mejores trapos (aunque llegando a mi casa ya no quería nada de eso y me puse más cómoda...). Apenas empezaba yo a acomodarme en mi silla, sacar mi librito cuando descubro que había una tiendita de alimentos adentro, para que uno comprara (¿no que no se podía comer adentro?)... aff no hace falta decir que me mlestó el echo, pero qué le vamos a hacer.
Total que mi número avanzó rápido y pasé a que me tomaran la foto. El chavo muy buena onda, la verdad... fue muy amable, me preguntó que a dónde iba y cosas cookie y hasta me dijo que salí abonita en mi foto del pasaporte :) ¡juar juar! Jajaja... en fin que ya que me pasó por ahí pasé a la siguiente fila, la de la lectora de huellas digitales. No sé por qué tanta fijación con estarme revisando 40 mil veces que sí sea yo, pero pues puse la mano derecha en la maquinita y que no me encontraban.... así que fui cambiando de dedos, de mano y hasta que por fin me encontró y ¡oh sorpresa! Que sale la foto que me tomaron en Miami hace 15 días... sí, me asusté ¡ja! Me tienen bieeen checadita! Pero pues ya qué, para eso es... supongo ¿no?
Así que bueno, pasé a la siguiente salita de espera. Pensé que ahora sí tardaría mil años porque no había ningún cónsul trabajando, pero en realidad sólo me dio tiempo de leer algunas cuantas hojitas de mi libro... fueron como 15 minutos y de pronto dice la pantalla "turno 057, ventanilla 42". Así que después de darme cuenta de que esa era yo, pasé a la ventanilla donde una señorita muy amable me atendió. Yo imaginaba que hasta me iba a preguntar por las perlas de la vírgen porque es una visa que significa que puedo vivir ahí, trabajar dentro de la universidad (sí, no es gran cosa... pero se puede) y conocer gente de ahí y bueno... pues yo llevaba papeles preparada para todo, como si fuera a haber una guerra de información para demostrar mi identidad y mis buenas intenciones, ¡ja! Sin embargo, la sorpresa fue grata pues sólo me preguntaron qué iba a estudiar y a qué se dedicaban mis papás... sólo eso. Ni siquiera un "¿y por qué en Estados Unidos?" ... la verdad me sorprendí mucho, pero fue muy agradable. No sé si me vieron bien, le contesté bonito a la señorita, hablo un inglés que los saca de onda y se emocionan o qué, pero TODOS fueron sumamente amables, no me preguntaron nada y hasta me dijo: tu visa está aprovada, que te diviertas mucho en tus estudios. ¡HA! ¿A que no se la esperaban? Yo definitivamente no.
Así que bueno, la verdad es que estoy muy feliz, todo ese proceso que según yo iba a ser horrible ya terminó. ¡Qué emoción! Por lo pronto Trinity me espera... :)
Así que finalmente fui a mi cita a las 6:30 de la mañana, cuando las gallineas apenas empiezan a poner :) Afff pensé que me iba a costar muchísimo levantarme, sobre todo porque casi no dormí (uno de esos días donde se pasa la noche pensando...) y no, resulta que llegué frequita a pesar de que me fui manejando yo solita (obvio mi mami me guió, aunque cada quien en su coche, pero pude llegar y salir y me fue bien!!! cada vez puedo ir a más lugares, ja!).
Total que pensé que la espera iba a ser eteeeeeeeeerna, de como unas 4 horas y había muchisísima gente (con todo y que llegué 20 minutos antes), y ya cuando comenzaba a hacerme a la idea que comienza a avanzar la fila y yo, por ser visa de estudiante y no turista, pasé antes. Sí, había una filita de gente que buscaba visas diferentes: de trabajo, de estudiante, de intercambio, en fin... de todo, pero no eran ni con mucho la fila de 200 que había antes. Total que llevaba una manzanita para la fila porque a esa hora no tenía muchas ganas de desayunar, pero seguro más tarde me iba a dar hambre.... y error... al entrar al edificio me hicieron tirarla. Me sentí mal (hay niños que no tienen qué comer y uno tirando la comida a la basura por las paranoias), pero qué le íbamos a hacer, hay que respetar las reglas y los letreros que dicen: "se prohibe".
Así que iba yo toda perfumada y elegante, dicen que es como una entrevista de trabajo y que a los cónsules les caen mal los fachosos (jajaja!) entonces pues me puse mis mejores trapos (aunque llegando a mi casa ya no quería nada de eso y me puse más cómoda...). Apenas empezaba yo a acomodarme en mi silla, sacar mi librito cuando descubro que había una tiendita de alimentos adentro, para que uno comprara (¿no que no se podía comer adentro?)... aff no hace falta decir que me mlestó el echo, pero qué le vamos a hacer.
Total que mi número avanzó rápido y pasé a que me tomaran la foto. El chavo muy buena onda, la verdad... fue muy amable, me preguntó que a dónde iba y cosas cookie y hasta me dijo que salí abonita en mi foto del pasaporte :) ¡juar juar! Jajaja... en fin que ya que me pasó por ahí pasé a la siguiente fila, la de la lectora de huellas digitales. No sé por qué tanta fijación con estarme revisando 40 mil veces que sí sea yo, pero pues puse la mano derecha en la maquinita y que no me encontraban.... así que fui cambiando de dedos, de mano y hasta que por fin me encontró y ¡oh sorpresa! Que sale la foto que me tomaron en Miami hace 15 días... sí, me asusté ¡ja! Me tienen bieeen checadita! Pero pues ya qué, para eso es... supongo ¿no?
Así que bueno, pasé a la siguiente salita de espera. Pensé que ahora sí tardaría mil años porque no había ningún cónsul trabajando, pero en realidad sólo me dio tiempo de leer algunas cuantas hojitas de mi libro... fueron como 15 minutos y de pronto dice la pantalla "turno 057, ventanilla 42". Así que después de darme cuenta de que esa era yo, pasé a la ventanilla donde una señorita muy amable me atendió. Yo imaginaba que hasta me iba a preguntar por las perlas de la vírgen porque es una visa que significa que puedo vivir ahí, trabajar dentro de la universidad (sí, no es gran cosa... pero se puede) y conocer gente de ahí y bueno... pues yo llevaba papeles preparada para todo, como si fuera a haber una guerra de información para demostrar mi identidad y mis buenas intenciones, ¡ja! Sin embargo, la sorpresa fue grata pues sólo me preguntaron qué iba a estudiar y a qué se dedicaban mis papás... sólo eso. Ni siquiera un "¿y por qué en Estados Unidos?" ... la verdad me sorprendí mucho, pero fue muy agradable. No sé si me vieron bien, le contesté bonito a la señorita, hablo un inglés que los saca de onda y se emocionan o qué, pero TODOS fueron sumamente amables, no me preguntaron nada y hasta me dijo: tu visa está aprovada, que te diviertas mucho en tus estudios. ¡HA! ¿A que no se la esperaban? Yo definitivamente no.
Así que bueno, la verdad es que estoy muy feliz, todo ese proceso que según yo iba a ser horrible ya terminó. ¡Qué emoción! Por lo pronto Trinity me espera... :)
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